No se sabe con certeza si nació vivo o muerto. Lo cierto es que los familiares denuncian un acto de negligencia. Un bebé recién nacido falleció y se investiga si nació vivo o murió a los pocos segundos de haber visto la luz, en el Hospital de Tingo María, donde fue atendida su madre en condiciones que hacen presumir de una gran negligencia en la atención.
La madre recibió todos sus controles, degún denunciaron los familiares, y todo hacía ver que las cosas estaban normales. El sábado fue internada para los trabajos de parto, pero no tenía avances, por lo que el lunes fue inducida. El intenso dolor que evidenciaba la parturienta no causó ninguna atención especial por el personal del hospital y sólo las súplicas de su madre hizo que una enfermera, que no tenía nada que ver en el servicio, acudiera a un médico para que finalmente la operen, cuando ya era demasiado tarde.
Según se sabe, el niño ingirió el líquido amniótico y ello fue la causa de su muerte, nos e quiso decir si antes del parto o después. La dolida abuela, con lágrimas en los ojos, explicó que no quisieron atenderla, que su hija se retorcía de dolor y nadie se compadeció de ella, cuando pidieron que la intervengan le dijeron que ellos (personal de salud) eran los profesionales y que debía esperar. Ahora sólo buscan justicia.
La posición del Hospital
El director del Hospital de Tingo María, Alfredo Tataje Silva, aseguró que se efectuará una exhaustiva investigación en torno a la muerte del recién nacido y que de encontrarse responsabilidad o negligencia, se tomarán las acciones correspondientes para aplicar la sanción que pueda corresponder.
“Vamos a hacer las auditorías correspondientes para determinar si hubo negligencia o se trata de un caso fortuito, estamos recopilando toda la información y si hubieran responsables se aplicará el peso de la ley, tengo entendido que la familia ya hizo la denuncia ante el Ministerio Público”, declaró.
